La formación la debió recibir inicialmente de su hermano mayor Leandro. Pudo haber también influjo de una escuela monástica o episcopal en Sevilla. Cultivó el griego que en España seguía teniendo cierta vigencia por la presencia Bizantina en la península. Esto le permitió acceso a los escritores clásicos que luego fomentará.
No se sabe a ciencia cierta si llegó a ser monje. El hecho de que haya escrito una Regula monachorum no es dato cierto para afirmarlo.
Hacia el 600 después de la muerte de su hermano es nombrado obispo de Sevilla. En el 619 celebra el Concilio II de Sevilla. Conocedor del Derecho Romano comienza Isidoro a usarlo e incorporarlo a los decretos y actas de las reuniones eclesiásticas.
En el 633 preside el Concilio Toledano IV. Su influencia es notable en lo que respecta a la formación de los clérigos y la liturgia. Se cree que redactó el «ordo celebrando concilio» matriz de los subsiguientes Concilios toledanos.
Durante cuarenta años de episcopado Isidoro influyó en toda la vida nacional española. Contribuyó por medio del influjo personal sobre los Reyes visigodos a la unidad cultural y religiosa de la península ibérica.
Redempto, clérigo de Sevilla nos ha dejado el testimonio de su muerte: cuatro días antes de su muerte practico en el coro de
No hay comentarios:
Publicar un comentario